Tuesday, August 19, 2008

La Relatividad en Mexico I: Los mitos

El titulo de esta contribución esta inspirado en una compilación que se publico recientemente ("La Relatividad en México", Ma. de la Paz Ramos Lara, Coordinadora, UNAM, 2008), y que surgió a raíz del año internacional de la física en 2005. Como su nombre lo indica, en dicho libro se tratan temas como el origen de la Relatividad en México, su desarrollo y su estado actual. Dado que la relatividad en uno de los temas de mi interés y como de alguna forma 'crecí' dentro de la comunidad mexicana en el tema, es un asunto de mi competencia. Además, siendo incapaz de quedarme calladito, pues en este espacio emitiré mi muy particular opinión sobre la historia de la relatividad en México. Aguas, porque es políticamente incorrecta a más no poder.

A mi me ha interesado, desde que estaba en la Facultad de Ciencias (de la UNAM, en la segunda mitad de los 80's), averiguar sobre los orígenes del tema en México y asistía a todo evento de remembranza, cuando todavía estaban vivos personajes protagónicos como Graef, Barajas y posteriormente el maestro Lozano. Tambien he `consumido' cuanto he encontrado al respecto, incluyendo textos de los expertos en el tema (cosa que yo no pretendo ser).

Cuando uno se pregunta sobre el origen de la relatividad en México, inmediatamente el tema se mezcla con la creación misma de la ciencias físicas en el país, pues los mismos personajes que fueron pioneros en la creación de la física en el pais, estuvieron directamente involucrados en temas afines a la relatividad. Para mi es notable cómo es que estos pioneros lograron crear todo lo que hoy damos por sentado: Instituciones (Fac de Ciencias, Instituto de Física, AMC, etc), infraestructura, instalaciones, etc. La contribución de Carlos Graef, Alberto Barajas y Manuel Sandoval Vallarta, etc es invaluable para el nacimiento de la ciencia moderna (o sea, en el s.XX) en México. A estos pioneros se les debe reconocer por haber creado la infraestructura y las condiciones para que otras generaciones pudiéramos 'caer en blandito' y no tuviéramos que preocuparnos tanto por eso.

Por otra parte esta el asunto de la historia de la relatividad en México. Es cierto que hubieron pioneros que introdujeron el tema en México y en particular el trío Barajas-Graef-Vallarta (BGV) fueron los primeros en interesarse en el tema y hacer investigación original con publicaciones internacionales. Esto es notable y digno de reconocerse. La historia oficial nos dice que la Relatividad en México, tal y como la conocemos hoy en dia, tuvo como sus origenes a los ya mencionados protagonistas. Es decir, como si hubiera habido una continuidad (por lo menos en la UNAM, que es la institución donde estuvieron en un principio) entre las contribuciones pioneras y los desarrollos actuales. Sin embargo, y aquí es donde me meto en donde habrá quien podrá no estar de acuerdo conmigo, por razones que desconozco, estos pioneros no crearon escuela. Me explico. Si uno analiza los grupos que existen hoy en día en el país y que están realizando contribuciones importantes al tema, y se trazan los orígenes de esos grupos, en ninguna ocasión se llega a BGV.

Veamos entonces con un poco de detalle cual es el origen de los tres principales grupos del país (que a su vez han sido el semillero del resto de los grupos). El grupo del Instituto de Ciencias Nucleares (ICN-UNAM), el más importante del país, nació gracias al Dr. Marcos Rosenbaum y la gente que trajo (Michael Ryan y Sergio Hojman). El grupo del CINVESTAV nació y se desarrolló gracias al Dr Jerzy Plebanski, quien creo escuela. El grupo de la UAM se formó gracias al Dr. Octavio Obregon, quien también ha influenciado en otros grupos (Guanajuato, en particular). Otros casos aislados como Sahen Hacyan y Sergio Sarmiento (quienes estaban en el I. de astronomía de la UNAM) también realizaron sus estudios en el extranjero. La parte que desconozco es si los mexicanos que fueron responsables del renacimiento de la relatividad en los 70's (Obregon, Hacyan) fueron motivados o entusiasmados por BGV. Yo me imagino que si, en cuyo caso, eso seria lo mas que habrían contribuido al desarrolla de la relatividad en México (en su contribución al libro, el Dr. Obregon cuenta haber sido alumno de tesis de licenciatura del Dr. Graef).

Si uno estudia los artículos que se publicaron en esa primera etapa por parte de BGV, se puede ver que la mayoría de los artículos no eran en relatividad general, sino en teorías alternativas que eran (y son) irrelevantes. Esto es muy desafortunado, pues uno quisiera ver a los pioneros como verdaderos héroes que no solo crearon las instituciones y condiciones para generaciones futuras, sino que también hicieron contribuciones seminales a la física. Mucho me temo que no es el caso. Desde 1943 hasta 1968 (¡¡25 años!!), el Dr Graef se dedico a estudiar la llamada teoría de la gravitación de Birkoff. Desconozco las motivaciones sociológicas de dicha teoría (no seria extraño que las hubiera), que pretendía 'ser rival' de la relatividad general de Einstein. Basta una breve lectura de dicho formalismo para darse cuenta (basado en lo que sabe uno hoy día), que es físicamente errónea y, por lo tanto, indefendible. Es una tragedia que se hayan malgastado 25 años de carrera académica de alguien tan capaz como el Dr. Graef en desarrollar algo totalmente irrelevante e inútil. ¿Cual podría haber sido la contribución mexicana a la relatividad general si se hubieran enfocado los esfuerzos en esa dirección?, es una pregunta que quedara sin respuesta.

Desafortunadamente, las aportaciones de la UNAM (por Vallarta, Graef y Barajas) a la relatividad fueron practicamente nulas. Y lo digo no porque este repitiendo ningún mito, como los muchos que a veces rodean a estos personajes míticos, sino porque he leído sus artículos, y he visto el impacto que tuvieron (a través de las citas en otros artículos). Debo aclarar, como ya explique antes, que esto en realidad no les quita ningún merito como pioneros de la física en México, y se merecen todo nuestro reconocimiento.

Aprovecho para contar algo de mi experiencia personal, y de cómo fueron mis primeros contactos con la comunidad de relatividad. Cuando entre a la facultad en 1985, estaba el mito de Graef, como la 'vaca sagrada' y super-experto en relatividad. Estaba dando un curso (no me acuerdo el nombre) y me atreví, con gran miedo, a entrar a algunas de las clases, de 'colado' (también lo hice a algunas clases de Barajas por la misma razón). Graef murió pocos meses después. Nunca tuve la oportunidad de platicar en persona con el. Pero lo que si me queda clarísimo era que la facultad de ciencias parecía entonces 'desierta' en lo que a relatividad se refiere. No había nadie que hubiera tomado 'la batuta' dentro de la facultad (o sea, no había 'escuela'). Cuando me interesó tomar una clase de relatividad, hubo una pequeña 'grilla' porque había alguien que se decía el ayudante de Graef (creo que se llamaba Heras). Pero como estaba peleado con el grupo en el poder dentro del departamento de física (tema interesante para la historia: Efecto de las 'mafias' de académicos dentro del desarrollo de las instituciones [tema que, por cierto, debe estar super-vetado]). Como lo querían correr (y lo lograron), no le dieron el curso y 'trajeron' a un experto en relatividad del ICN. Así fué como me entere que existía investigación en relatividad en la UNAM, pero que se hacia en el ICN. En ese momento cambió mi carrera, me involucre con el ICN y ya lo demás es historia.

Lo que me queda clarísimo es que desde entonces para acá, quienes han influenciado en los alumnos de la Facultad de Ciencias para interesarse en estos temas han sido los investigadores del ICN. Se consiguió, gracias a varios de ellos, que la materia de relatividad fuera obligatoria en el nuevo plan de estudios de la carrera de física, se han ocupado de impartir cursos en licenciatura y posgrado, etc. Sobre el porque algunos temas se desarrollaron después que otros, mi hipótesis es que aspectos sociológicos han sido muy relevantes en la historia de la física en México, donde grupos poderosos han determinando cuales temas se desarrollaban y cuales no, hasta que quedaban rebasados y no podian impedir más el desarrollo de alguna área. Eso les paso, en particular, a los físicos de partículas, junto con los relativistas (quienes se pudieron desarrollar en otro instituto que no era el Instituto de Física y gracias al Dr. Rosenbaum). Esta historia es también fascinante! Se queda de tarea para los verdaderos estudiosos del asunto.

En resumen, el mito de que la relatividad en México, como la conocemos actualmente, se debe a los pioneros BGV es falso. La relatividad en México renació a principios de los años 70´s en varias instituciones de manera casi simultanea y en ningún caso hubo una continuidad (científica) con los trabajos de los pioneros.

Thursday, May 22, 2008

¿Qué es la Ciencia?: Mis cinco centavos


Comenzare por hacer las preguntas que cualquiera que se interese por la ciencia se habrá hecho tarde que temprano: ¿Qué es la Ciencia? ¿Cuál es su importancia para el país?, y ¿Qué papel juega en el desarrollo y viabilidad de México? Al tratar de dar respuesta a estas preguntas no pretendo descubrir el hilo negro ni tener total originalidad en los puntos de vista.

La Ciencia es una actividad social de la mayor importancia. Existen varias formas de ver a la Ciencia, como podría ser como aquella serie de actividades que nos proveerán de milagros para toda la humanidad a la vuelta de la esquina. Esta se le llama la visión mesiánica. Otra visión errónea es pensar que la Ciencia y los científicos, en los países en desarrollo, deben de abocarse exclusivamente a “resolver los grandes problemas nacionales” (visión utilitaria).

La manera correcta de ver a la ciencia, según mi opinión, es como parte integral de la cultura de un país. Es una parte importante tanto de la “clase intelectual”, así como objeto de orgullo nacional, al igual que lo sería una muy buena orquesta sinfónica. Pero probablemente el papel más importante de la ciencia es ser, a través de sus practicantes, la punta de la pirámide de la educación del país. Es decir, sólo cuando se tiene una comunidad suficientemente grande y altamente capaz de académicos, que se dediquen a la investigación, tanto en las Universidades (publicas y privadas) como en los Institutos Superiores de todos los estados, podemos aspirar a elevar el nivel de la educación superior y como cascada, de todo el sistema educativo nacional. Tener un aparato científico del más alto nivel nos garantiza que la pirámide mantenga (o eleve) su altura mientras se ensancha la base. La ciencia como cultura también incluye la divulgación de ésta, tanto a la población en general como a la esfera de decisiones (la clase política).

Como país necesitamos adoptar una cultura científica, o como otros colegas han abogado, debemos abatir el analfabetismo científico. Mi propia definición de este ultimo es un poco circular: es la falta de cultura científica. Pero entonces ¿que debemos hacer para transformarnos como país, salir de la obscuridad y entrar a la llamada `era del conocimiento'? ¿debemos volvernos todos científicos? Respuesta: No. ¿Debemos elegir a un científico como presidente?: Respuesta: NO.¿Debemos como sociedad entender que la ciencia juega un papel fundamental en la transformación de país en desarrollo a país desarrollado? Respuesta: SI. ¿Se trata entonces de aumentar el presupuesto a ciencia y tecnología? Respuesta: Si, pero no es suficiente. Tenemos que darnos cuenta, los políticos, legisladores, tecnocratas, educadores, periodistas, etc. que NO somos un país que valora la ciencia, y que nunca saldremos del subdesarrollo si no cambiamos eso. No se trata solamente de encontrar las 'reformas estructurales que transformen al país', sino de preguntarnos: ¿Que país queremos tener en 30 años? Estamos a varios años luz de distancia de donde quisiéramos estar. ¿Como saberlo? Fácil. podemos comenzar a hacernos preguntas de lo mas simples, como por ejemplo: ¿Porque no podemos diseñar, construir y lanzar nuestros propios satélites? O ya de perdida ¿diseñar y construir aviones a reacción comerciales y dominar el mercado, como lo hace Brasil? ¿Que acaso somos mas brutos que los brasileños y por eso no podemos? Respuesta: No, no somos, pero por la forma como NO hacemos las cosas como ellos (y los ejemplos a seguir sobran), a veces, nos portamos como tales. ¿Quien tiene la culpa? Respuesta: Todos.

Yo creo que como que ya estuvo bueno de hacernos, y es hora de ponerse las pilas. Todos. La tarea de crear una cultura científica la tenemos tanto los científicos como los divulgadores, pues nos corresponde cambiar la percepción hacia la ciencia. Tratare de abundar en las formas como considero que los científicos profesionales debemos afrontar el reto y contribuir a cambiar la mentalidad de la sociedad para poder evolucionar. Pero entes de eso, contestare lo que es la ciencia y que quiere decir tener una 'actitud científica'. La característica mas importante de la ciencia y del espíritu científico es el estar constantemente renovándose, cuestionándose y sobre todo, estar dispuesto a aceptar que gran parte (o todo) de lo que se creía verdadero, podría estar totalmente mal. Así es como la ciencia progresa, y no acumulando 'información científica'. Ense
ñar ciencia es enseñar a razonar, a cuestionar, a dudar y a ser capaz de convencerse de lo contrario que uno creía si, con argumentos y evidencias se le argumenta. No se trata de pretender que la gente se aprenda 400 mil 'datos científicos', o que se aprendan que 'así funcionan las cosas'. Eso se llama evangelizar (o 'catequizar') y le corresponde a otros cultivar el genero. Tal vez estarán de acuerdo conmigo que la tarea es monumental y urge difundir la ciencia. Igual y si es la ciencia la que al final debe 'resolver los grandes problemas nacionales', pero no de la forma boba como se imaginan los analfabetos científicos, sino precisamente lo contrario, comenzando por aniquilarlos (y volverlos 'científicamente orientados'). Espero que mis cinco centavos contribuyan de alguna forma.




Wednesday, May 21, 2008

Aguas: proseguir bajo su propio riesgo

Este primer post tiene como objetivo advertir al posible lector sobre lo que es y lo que no es este espacio. Aquí se ofrecerán reflexiones y opiniones personales sobre temas generales de ciencia, de divulgación de la ciencia o de política científica. Estas opiniones son personales, muy frecuentemente políticamente incorrectas, y de ninguna manera reflejan la postura de las instituciones que me patrocinan, a través de mi 'day job' o de proyectos de investigación. Esta actividad se realiza en mis 'ratos libres' y para su realización no se han empleado recursos públicos de origen federal, ni se ha lastimado a ningun animalito.

El contenido de lo que sigue seguramente sera tan erratico como este primer post, con todo y su falta de acentos. Así que quedan advertidos y pueden proseguir bajo su propio riesgo. Ninguna contribución tiene garantía, ni fecha de caducidad.